Temas a tratar:
- ¡Hazlo!
- Una vez y para siempre
- Victoria total
Desarrollo:
1. ¡Hazlo!
Apocalipsis revela a Jesús, nos muestra la gracia de Dios, que somos más que vencedores.
Apocalipsis 5:2 (RVR1960)
“Y vi en la mano derecha del que estaba sentado en el trono un libro escrito por dentro y por fuera, sellado con siete sellos. Y vi a un ángel fuerte que pregonaba a gran voz: ¿Quién es digno de abrir el libro y desatar sus sellos?”
Dios ordenó a Moisés construir un tabernáculo, y fue muy específico.
Cuando ofrecieron el holocausto, Dios envió fuego del cielo (Levítico 9). ¿Por qué? Porque habían construido según el patrón.
Moisés tenía que construir el tabernáculo y el arca del pacto tal como Dios lo había indicado porque es un reflejo del cielo, un símbolo que luego vería en la eternidad (Hebreos 8:1-5).
El tabernáculo es figura y sombra de lo celestial.
Dios le dijo a Moisés: “hazlo como yo digo”, y él lo hizo en Fe.
Hay muchas cosas que Dios nos pide hacer, pero queremos hacerlo a nuestra manera.
¡Hazlo como Dios dice! Si no lo entiendes ahora, lo entenderás después.
2. Una vez y para siempre
Cada mueble del tabernáculo se encuentra en el cielo.
El altar está en la entrada, el primer paso, donde Jesús derrama su sangre.
Apocalipsis 5:3-4 (RVR1960)
“Y ninguno, ni en el cielo ni en la tierra ni debajo de la tierra, podía abrir el libro, ni aun mirarlo. Y lloraba yo mucho, porque no se había hallado a ninguno digno de abrir el libro, ni de leerlo, ni de mirarlo.”
Este libro es el plan de salvación para todos los siglos.
Cuando algo está sellado muestra AUTENTICIDAD. Y este es el auténtico plan de salvación de Dios que ni el diablo puede vencer.
Nadie en el cielo, ni en la tierra ni debajo de ella, ninguno puede llevar a cabo el plan de salvación.
Apocalipsis 5:5 (RVR1960)
“Y uno de los ancianos me dijo: No llores. He aquí que el León de la tribu de Judá, la raíz de David, ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos.”
¿Cuándo venció el león de la tribu de Judá? En la muerte y resurrección de la cruz.
Jesús venció en la cruz una vez y para siempre (Hebreos 10).
3. Victoria total
Apocalipsis 5:6
“Y miré, y vi que en medio del trono y de los cuatro seres vivientes, y en medio de los ancianos, estaba en pie un Cordero como inmolado, que tenía siete cuernos, y siete ojos, los cuales son los siete espíritus de Dios enviados por toda la tierra.”
El león es un cordero. Jesús en la tierra fue el cordero de Dios, hoy día es el león de Judá.
Vino como siervo pero hoy es el Rey de reyes, Señor de señores.
Apocalipsis 5:7-8 (RVR1960)
“Y vino, y tomó el libro de la mano derecha del que estaba sentado en el trono. Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero; todos tenían arpas, y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos;”
Jesús rompió el velo, ahora el incienso (oraciones de los santos) va directo al trono, sin impedimento.
Cuando uno entiende el tabernáculo, ve el cielo.
Jesús tenía el derecho legal, el único digno.
Un cordero sin mancha que fue a la cruz, recibiendo nuestro castigo, pero hoy es el león de la tribu de Judá.
Es una victoria total y plena, una vez y para siempre.
Jesús ha ganado el derecho sobre tu vida, y es el único digno de llevar a cabo el plan de Dios para ti.